Actualizado el lunes, 15 febrero, 2021
¿Te ha pasado que llega esta época del año y te pones reflexivo? Es algo natural, aunque debiera ser una cuestión cotidiana.
Nota escrita por Isabel Quesada para Mayores Conectados
“Cuando ante ti se abran muchos caminos y no sepas cuál recorrer, siéntate y aguarda; respira profundo, quédate en silencio y escucha a tu corazón y, cuando este te hable, levántate y ve donde él te lleve”. Del libro “Donde el corazón te lleve”, de Susanna Tamaro
Intenciones para el nuevo año
A continuación les compartiré un pequeño texto tomado de un libro que me pareció maravilloso y que me dejó muchas enseñanzas.
“He aquí la historia de una mujer valiente, que realizó un largo viaje a pie con los aborígenes y asimiló toda la sabiduría de una tribu de remotos ancestros. Lo que ella aprendió y nos transmitió es lo que nosotros necesitamos re-descubrir: el contacto con la naturaleza y la fe en el conocimiento profundo de nuestro propio ser”. Elizabeth Kübler-Ross
“Las voces del desierto”, de Marlo Morgan.
“Cuando les hablé de las fiestas de cumpleaños, me escucharon atentamente. Hablé del pastel, de las canciones, de los regalos, y de la nueva vela que se incorpora cada año.
—¿Para qué lo hacéis? —me preguntaron—. Para nosotros una celebración significa algo especial. Pero no hay nada especial en hacerse viejo. No exige ningún esfuerzo. Ocurre, simplemente.
—Si no celebráis que os hacéis mayores —dije yo— ¿qué celebráis?
—Que nos volvemos mejores —fue la respuesta—. Lo celebramos si este año somos personas mejores y más sabias que el año pasado. Solo uno mismo puede saberlo, así que eres tú quien debe decirle a los demás cuándo ha llegado el momento de celebrar la fiesta.
Vaya —pensé—, eso es algo que debo recordar”.
¿Qué me deja esta reflexión?
Este pequeño diálogo me resultó tan pero tan fuerte, que trato de aplicarlo cada vez que cumplo años y en cada reflexión de fin de año, que es a lo que quiero apuntar aquí.
Creo que, más allá de las vicisitudes de la vida que a cada uno le toque transitar, está bueno que podamos reflexionar acerca de otras cosas que no son “tan visibles”, más allá de la vida cotidiana. Ir un poco más profundo.
¿Podemos ser felices?
Existe una fórmula que, si llegamos a ponerla en práctica, nos aproximará bastante al ideal:
APRENDER A VIVIR EL PRESENTE,
SIN LOS TRAUMAS DEL PASADO
NI LAS EXPECTATIVAS DEL FUTURO.
Aprender a disfrutar cada momento como si fuera único e irrepetible teniendo en cuenta que la felicidad no es la meta sino el camino por el que transitamos la vida. Debemos aprender a amarnos a nosotros mismos con lo que somos y lo que tenemos.
Como decía Dag Hammarshöld: “El camino más difícil es el camino al interior…” y, al menos, debemos recorrerlo una vez en la vida.
¿He sido mejor persona que el año que pasó? ¡Qué fuerte esta pregunta! ¿Verdad?
Para respondernos, es bueno tener en cuenta algunas palabras:
Perdonar: perdonarse a sí mismo y perdonar a los demás. Aprender a perdonar es liberador.
Dar: aprender a dar sin esperar a cambio. Lo que uno da, vuelve… indefectiblemente. Si doy amor recibiré amor; si doy odio, recibiré odio.
Tener fe: en uno mismo, por sobre todas las cosas y esperanza y optimismo en que lograremos nuestros propósitos.
Amar: sin límites, amar y amar y amar… de forma amorosa y compasiva (con-pasión).
Con estas pequeñas reflexiones, desde Mayores Conectados, queremos dejarles nuestros mejores deseos de que, entre todos, logremos ser mejores personas.
No hay apuro, María Angélica, poco a poco. Me alegra mucho que te haya gustado la nota. Todos tratamos de poner en práctica estas reflexiones que nos potencian. ¡Gracias por tu lindo comentario! <3
Hola Maria Angelica, que lindas palabras nos regalas, estamos muy agradecidos por tu comentario. ¿No tenés impresora?, no es importante, ¡Que nada detenga tus ganas de aprender! Saludos.
¡Me alegra que te guste, Rosa! 😍
¡Qué bueno, Patricia! Me alegra saber que te gustó la nota. 😍
Muchas gracias Patricia por su comentario, ¡Nos gratifica enormemente! Saludos
ME ENCANTO, MAÑANA EMPIIEZO A LEERLO CON LENTITUD Y PRACTICAR LO QUE NO SE, OJALA PUEDA TENER UNA IMPRRESORA ASI TAMBIEN PUEDO PRACTICAR CON ELLA GRACIASS POR TODO, SALUDOS MARIA ANGELICA CEBALLOS
Excelente nota! Muy emotiva, nos hace reflexionar sobre las cosas sencillas de la vida. Felicitaciones!
Excelente!!!